De la nota de prensa enviada ayer desde el Ministerio de Empleo y Seguridad Social sobre los datos de los registros del Servicio Público de Empleo estatal (demandantes de empleo, paro, contratos y prestaciones por desempleo) del mes de abril de 2014, se extraen datos esperanzadores, pues el paro registrado baja en este mes en unas 111.565 personas, siendo el mayor descenso de toda la serie histórica en un mes de abril. Esto supone que el número total de parados registrados en las Oficinas de Empleo se sitúa en 4.684.301.
Además de la reducción del paro entre jóvenes menores de 25 años, especialmente en Andalucía, Cataluña y Madrid, se resalta el fuerte incremento de la contratación indefinida también en este mes, que alcanza la cifra de 1.296.529 de contratos. La contratación bajo la modalidad del contrato para la formación y el aprendizaje sigue evolucionando de forma favorable, celebrándose un total de 11.317 contratos de formación, lo que supone un 31,11% más que en abril del año pasado. En cuanto al sexo en este tipo de contratación, 5.420 de ellos se han realizado a hombres y 5.869 a mujeres.
Para la secretaria de Estado, Engracia Hidalgo, estas cifras confirman que “se aprecia el impacto de la incipiente reactivación económica en los principales indicadores del mercado de trabajo“.
Sin duda alguna, las empresas están encontrando en el contrato para la formación un tipo de contratación idónea para estos tiempos de crisis, que no solo es ventajosa para la empresa, sino también para los trabajadores que pueden obtener una parte formativa y otra práctica en el entorno del mercado de trabajo real.
Uno de los aspectos más interesantes para la empresa en esta modalidad contractual es que puede disfrutar de una reducción de cuotas en la Seguridad Social del 100% para pymes (es decir, coste 0) o del 75% si la empresa cuenta con más de 250 trabajadores (coste 19,90 €). Además, la formación inherente de este contrato es una formación bonificada, completamente sin coste.
Para el trabajador también existe una reducción de cuotas en la Seguridad Social del 100%, teniendo cubiertas todas las prestaciones sociales, incluida el desempleo, consiguiendo un incremento sustancial de su currículo profesional, tanto en el aspecto formativo como en el laboral.
